A expensas de que el permiso de obras sea expedido, para lo que Suba trabaja en la redacción del proyecto de ejecución, Renthas ya ha dado a conocer que será la operadora de este establecimiento para unos treinta apartamientos turísticos, lo que supondrá una inversión de 9,5 millones de euros.

El proyecto ha sido diseñado por el estudio de arquitectura T10, con sede en Sevilla, y busca ejecutar un «edificio emblemático e icónico que enriquezca la escena urbana a través de su uso mixto: comercial y de alojamientos turísticos». Las esponjas de mar y los bancos de coral son la inspiración para el diseño de esta construcción, cuyas obras podrían comenzar en los próximos meses.

Según se anunció en septiembre del año pasado, las plantas baja y primera del edificio tendrían un uso comercial y en la primera se habilitaría un patio interior que podría servir como terraza a una cafetería. Desde la planta segunda a la sexta se albergarían unos 30 apartamentos, con diferentes capacidades de usuarios. Por último, en la cubierta se ha proyectado una piscina y un bar junto a un espacio para tomar el sol y servir de terraza.

El blanco y la distribución irregular de los vanos, así como los planos curvos y ondulados, son las características más llamativas de un edificio que, según han señalado desde la promotora, está diseñado para favorecer la ventilación de todos los apartamentos, de forma que se reduzca el consumo de energía. «El propósito de esta actuación es regenerar la trama urbana en nuevas zonas de centralidad», apuntaron desde Suba, empresa promotora del grupo Sinerba Holding, en el que se encuentra la constructora malagueña Bilba.